Algunos periodistas de espectáculos aún le temen como el “diablo a la cruz” a las actividades de la cerveza Brahma.
Creía que eso era un problema superado, pero no es así.
Hay quienes hasta han rechazado hasta viajes promocionales de esa empresa al carnaval de su país, Brasil, por temor a "calentarse" con la cerveza de la competencia, la local Presidente y no perder una publicidad de dos o tres pesos en sus respectivos medios.
Una actitud de "auto-censura", pues muy a pesar de que la Cervecería Nacional Dominicana no le ha perdonado aún al cantante Héctor Acosta -El Torito- que firmara contrato con Brahma, no creo que se presten también a "intimidar" a comunicadores.
Aunque un alto ejecutivo de Presidente me confrontó hace par de meses atrás cuando asistía en calidad de periodista a un concierto de su marca Bohemia en el Monumento de Santiago y todo porque en mi rol de productor de los eventos de la agencia Quepe Tours tengo una alianza con Brahma.
Pero como el ser humano debe tener definida su personalidad le referí a ese funcionario de la cervecería que no aceptaba reprimendas porque nada le debo a esa empresa y que lo único anti-ético sería que yo me apareciera allí con algún distintivo de la marca de competencia.
Esa actitud debieran seguirla algunos colegas, pero parece ser una "misión imposible"...
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