Escena de la película "Teniente Amadado"
El reclamo de mejores pagos y trato a los actores en la industria dominicana del cine es debatido desde hace días por algunos de los que se sienten afectados y otros que se suman. El veterano actor Giovanny Cruz fue el primero que habló y ha enfrentado a cineastas, “actores de cine” y “actores del teatro”. Y, aunque algunos quieran separarlos, los entrevistados en este trabajo, Josué Guerrero, Johnnié Merdeces, Giovanny Cruz y Niurka Mota, coinciden en que un actor no es de teatro ni de cine, sino simplemente actor.
El móvil principal de la discusión tiene que ver con el trato que reciben los actores que hacen vida en el teatro frente a los que han hecho “nombre” en el cine, o los extranjeros que llegan para una producción específica. Unos ganan mucho dinero y otros muy pocos pesos.
“Aquí hay productores de cine que están ofertando 100, 125 y 200 dólares por día a un actor de formación, mientras pagan hasta más de un millón (en total) a dos o tres cómicos. Lo peor es que hay unos cuantos actores y actrices que aceptan ese pago”, reitera Giovanny Cruz, quien con 45 años en el teatro se siente con la capacidad de reclamar su derecho y el de muchos otros colegas que sí esperan las consideraciones justas para un profesional de la actuación.
Con estos reclamos surge una pregunta: ¿es importante fijar una tarifa única para que los actores del país trabajen en el cine?
Josué Guerrero considera oportuna la medida, que, según Giovanny, ya existe, pero muchos violan la misma. “Estoy completamente de acuerdo con que se fije una tarifa. Cuando salió la DGCINE se habló de que defendería a los actores dominicanos, a propósito de que llegaban muchos proyectos internacionales. Tengo entendido que le pagaban casi como extra a los actores que participaron en muchas cintas de producción internacional, ellos quizás lo hacían por la proyección que representaba para ellos en ese momento”.
Guerrero cuestionó el hecho de que muchas veces se les pone una tarifa para los actores secundarios y otra a los primarios. “A veces los secundarios tienen más trabajo, incluso”.
Guerrero señala que él graduó de arte dramático, “no sólo estudié para ser un actor de teatro”. Entiende que debería haber un equilibrio entre los talentos extranjeros y los dominicanos porque “no puede ser que nosotros ganemos tan poco y que una persona que ni siquiera conoce la actuación gane más”.
Giovanny Cruz fue claro. El veterano actor aseguró que tanto él como sus colegas lo que requieren es un pago justo. “No queremos mucho más de lo que nos pueden pagar, pero tampoco que nos paguen miseria. Cuando vino Andy García estaban pagando 150 dólares y hasta 50 dólares, eso no puede ser”.
Se refirió al tema de las figuras que están llevando gente al cine (comediantes), a quienes les pagan dos millones de pesos y más “y a un actor de teatro le quieren dar migajas”.
“Pretendemos hacer un encuentro con los directores porque no queremos una tarifa imposible; sin embargo, no podemos dejar que nos exploten”, manifestó Cruz.
Valoró el trabajo que realiza la Asociación de Actores de Cine, que es presidida por Augusto Ferias, y resaltó que el gremio está hecho para proteger, aunque aclara que tampoco “queremos convertirnos en una necedad”.
Niurka Mota es otra de las veteranas de la actuación. Ella está de acuerdo con el pedido de Giovanny y con que se fije una tarifa que pueda hacer más justa la situación.
“No he ido al cine, me he quedado dentro del teatro porque alguien tiene que quedarse en el teatro. Sí estoy de acuerdo que el talento se paga en todas partes del mundo, si cualquier productor quiere tener en su staff a una persona que tiene su nombre y trayectoria, eso debe pagarse”, afirma Mota, quien espera llegar al cine con un pago justo.
Johnnié Mercedes, además, toca el punto de que muchos productores creen que son las figuras las que llevan gente al cine y no la historia en sí. (Emelyn Baldera/L.D.)
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