jueves, 2 de mayo de 2013

¡QUÉ CRUEL ASESINATO! MATAR UN ESTUDIANTE POR UN CELULAR

El cadáver de Mario Alberto Rosa Cortorreal yace en el féretro mientras es acariciado por su madre.

Estos son crímenes que le duelen mucho a una sociedad, como el asesinato del joven estudiante de Publicidad de apenas 19 años de edad de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, Mario Alberto Rosa Cortorreal, por parte de asaltantes que le asestaron 8 balazos para quitarle un celular.

Qué poco valor le dan a la vida estos forajidos que sin ninguna inquietud de conciencia matan a una persona valiosa por un objeto que van vender por un precio muy por debajo de su costo real para repartirse esos centavos entre todo el grupo. ¿A cómo le toca a cada asesino? ¿Algunos 400 o 300 pesos? ¿Qué se puede hacer con cada uno de estos vulgares, rastreros y diabólico criminales?

Pues darle una respuesta contundente aunque salgan por ahí aquellos consabidos defensores de estas ratas que precisamente amparados en ellos y por el azaroso y vigente Código Procesal Penal siguen cometiendo tropelías a diestra y siniestra en contra de una ciudadanía que ya no tiene quien la defienda.

¡Cuidemos nuestros hijos y familiares acompañándoles en el camino cuando se pueda! Y también aconsejándoles nos mostrar nada de valor monetario ante extraños porque hasta por un celular te van encima 8 malditos "tigueres" para arrebatarte la vida que Dios te ha dado y que sólo El debe quitarla.

CRÓNICA DEL ASESINATO APARECIDA EN LISTÍN DIARIO

PESAR
“Era mi único hijo, por un celular, ocho tiros, 19 años, un muchacho sano”
ASÍ LLORABA EL PADRE DEL JOVEN MARIO ALBERTO ROSA CORTORREAL, ULTIMADO HOY DURANTE UN ASALTO EN HERRERA
Coralis Orbe
Familiares y amigos lloran la muerte del joven Mario Alberto Rosa Cortorreal, el estudiante de publicidad que fue asesinado en la mañana de ayer de ocho disparos por supuestos atracadores en el sector de Herrera para quitarle su celular.
“Era mi único hijo, por un celular, ocho tiros, 19 años, un muchacho sano que nunca me hizo hablarle dos veces. No tengo deseos de hablar”, dijo el padre de la víctima, quien se negó a ofrecer más informaciones cuando se encontraba en las afueras de la funeraria Blandino del referido sector.
“Él salió para la universidad esta mañana (ayer). Era un niño que solo salía de su casa al trabajo, no pedimos justicia. ¿Para qué, si no resuelven nada? Él no es el primero que muere así”, expresó María Cortorreal, tía del joven asesinado.“¿Qué vamos a hacer sin él?”, decían con tristeza varias amigas del estudiante universitario, quienes además lo describieron como un muchacho alegre, de la iglesia y muy trabajador.
Rosa Cortorreal tenía diez años participando en actividades juveniles en la parroquia San Pedro Nolasco de Herrera.
La madre del joven, Niurka Cortorreal, también se negó a ofrecer información a la prensa.
Miembros de la familia dicen que el joven será enterrado mañana en el cementerio Cristo Redentor, posiblemente en horas de la mañana.

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