¡EL BRAZO POR LA VENTANA!...¿Y LOS 20 MIL POLICÍAS DÓNDE ESTÁN? ¡DONDE LOS LADRONES NO VAN!

Por Alci de la Rosa

CUANDO MI HIJA YASLIN (JUDITH PARA SUS AMIGOS Y AMIGAS DE ESTUDIO) AVISTÓ QUE UN BRAZO HUMANO PENETRABA POR UNA DE LAS PERSIANAS DE  NUESTRO HOGAR, AQUÍ EN EL ENSANCHE LUPERÓN, SE QUEDÓ PETRIFICADA Y LLENA DE MUCHO MIEDO.

Fue como a eso de las dos de la madruga del lunes cuando ella estaba estudiando para el fin de clases en la Universidad Autónoma de Santo Domingo y decidió ir al baño y al momento de abrir la puerta para regresar a la sala vio aquella espeluznante escena del brazo de un ladrón que penetro por una de las aberturas de la persiana doble de metal con protección de enrejado de hierro y trataba de alcanzar el manubrio para abrir la del lado derecho con el fin de alcanzar cualquier objeto.

De inmediato ella atendió a hacer un ruido con la puerta para dar a entender que había alguien despierto y de inmediato el tunante emprendió la escapada. A seguidas marcó el celular de su mamá  que dormía junto a mí y procedieron a cerrar la parte superior de todas las persianas, ya que siempre dejábamos la parte de arriba abierta para asunto de mejor ventilación.

Nosotros residimos en una segunda planta pero los techos de los vecinos nos quedan a ras lo que facilita que los malhechores lleguen con facilidad al lugar.

El dueño de una farmacia cuyo techo esta cerca a nuestra casa dijo que sintió en noche pasada que alguien caminaba sobre los tejados contiguos y que se puso en alerta para evitar cualquier intento de los merodeadores. 

Hacía años que por este sector no rondaban los desconocidos en horas de la noche ni del día pero con la agudización de la crisis económica parece que el número de los delincuentes tirados a las calles ha aumentado en forma sumamente peligrosa y hay que tomar todas las medidas de lugar.

Entre tanto el Gobierno y el Jefe de la Policía han anunciando el lanzamiento de 20 mil policías para proteger la ciudadanía de la acción depredadora de los tunantes, sin embargo no se ven las necesarias patrullas por estos sectores. No es solamente patrullar de día en la Av. Duarte, Las Américas u otras vías de importancia. Las calles de noche se aprecian aparentemente solitarias sin embargo en la sombra hay miles de pillos accionando contra la propiedad privada y de paso atentando contra la vida de pacíficos ciudadanos.

Es urgente que el trabajo policial sea más efectivo poniendo en práctica métodos que estén acorde con el grado de peligrosidad de la delincuencia que nos azota hoy o de lo contrario el ciudadano común tendrá que organizarse en grupo y proceder a su auto protección a como de lugar.