Una madre pobre con sus hijos en brazos busca refugio de las aguas de Sandy
Las lluvias provocadas por el huracán Sandy dejaron hasta el momento un saldo de 12 mil 581 personas desplazadas, 1,149 viviendas afectadas y 104 comunidades incomunicadas.
De las comunidades incomunicadas a causa de la crecida de ríos, 52 pertenecen a la provincia de Azua; cinco a San José de Ocoa, una en Santo Domingo Oeste; seis en Santo Domingo Este, seis en Sánchez Ramírez; cuatro en Puerto Plata, y tres en la provincia Duarte.
El COE mantiene 14 provincias en alerta roja, 12 en amarilla y 6 en verde.
Francisco Holguín, de la Oficina Nacional de Meteorología, sostuvo que los aguaceros continuarán hasta el sábado al mediodía, en ocasiones con tormentas eléctricas y ráfagas de viento en gran parte del territorio nacional, siendo de mayor intensidad y frecuencia sobre las regiones Suroeste, Oeste, Noroeste, la cordillera Central, el centro del país y el litoral Sur, debido al campo nuboso que acompaña este sistema tropical.
Mientras que el director del COE, Juan Manuel Méndez, llamó a las personas abstenerse de cruzar ríos y caña- das para evitar pérdidas humanas como ocurrió durante el paso de la tormenta Isaac.
Onamet, mantiene el aviso de inundaciones y desbordamientos de ríos, arroyos y cañadas, así como deslizamientos de tierra a los residentes en zonas de alto riesgo en todo el país, principalmente en las regiones Suroeste, Oeste, Noroeste y centro del Territorio Nacional.
Las provincias que están en alerta roja son Barahona, Pedernales, Bahoruco, San Juan De La Maguana, Independencia, Elías Piña, Dajabón, Monte Cristi, Azua, Santo Domingo y el Distrito Nacional.
Mientras que en amarilla están Santiago Rodríguez, San José De Ocoa, San Cristóbal, Valverde, Peravia, Sánchez Ramírez, Duarte, La Vega, Monseñor Nouel y Monte Plata.
En tanto que Espaillat, El Seybo, Santiago, La Altagracia, Puerto Plata, La Romana, Hato Mayor, San Pedro de Macorís, María Trinidad Sánchez, Samaná y Hermanas Mirabal están en alerta verde.
Vivienda afectada por la caída de árboles
Aseo de la Capital
El alcalde Roberto Salcedo dispuso el reforzamiento de las labores de aseo, poda de árboles, limpieza de imbornales y del sistema de drenaje en el Distrito Nacional, para evitar brotes de enfermedades que podrían derivarse por inundaciones en sectores críticos de la Capital, producto de las intensas lluvias provocadas por el huracán “Sandy”.
Ordenó una vigilancia especial en los sectores La Ciénaga, Los Guandules y Cristo Rey, donde tradicionalmente se producen inundaciones en épocas de tormentas, huracanes y lluvias intensas.
Salcedo instruyó a los departamentos operativos del Ayuntamiento del Distrito Nacional a que hagan un esfuerzo “extraordinario”, por lo que dispuso que sean lanzados a las calles todos los equipos disponibles.
Las brigadas de limpieza y aseo del Cabildo fueron provistos de motosierras, machetes, carretillas, guantes plásticos y de hule reforzado, serruchos, botas, palas, palas de corte, coas, escobillas, machetes y otros implementos.
EFECTOS EN LAS PROVINCIAS MONTE PLATA:
Los ríos Ozama, Yabacao, Boyá, Parmarejo, Congo y Arazao se desbordaron a causa de las intensas lluvias, provocando el aislamiento de varias comunidades, así como la inundación de 55 viviendas en la zona urbana.
Las comunidades aisladas son Batey Yabacao, Mata Los Indios, La Altagracia, Casueza, El Talao, Peralvillo, Hato Viejo, La Guásuma, El Cinco, El Doce, Cojobal y Bayaguana.
ZONAS DE TAMAYO:
El director de la Defensa Civil en Neiba, Víctor Manuel Méndez, instruyó a los demás organismos de socorro a evacuar preventivamente las comunidades del Jobo, Uvilla y Mena Abajo, en el municipio Tamayo, debido a la crecida incontrolable del río Yaque del Sur.
EN JAQUIMEYES:
Brigadistas de protección Civil de la regional de la Defensa Civil en Jaquimeyes, conjuntamente con el comité de Prevención, Mitigación y Respuesta (PMR) de aquí, evacuaron la noche del miércoles a unas cuarenta familias residentes en este municipio.
EN PEDERNALES:
Los efectos del huracán “Sandy” dejaron en esta provincia una vivienda destruida, el servicio telefónico colapsado y averiado, la planta física del hospital Dr. Elio Fiallo anegada, árboles derribados y la crecida del río que divide este lado con Haití. (Katheryn Luna/Listín)
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