martes, 30 de octubre de 2012

FERNANDO VILLALONA DICE QUE DEJAR DE FUMAR HA SIDO LA MEJOR DECISIÓN DE SU VIDA

Fernando Villalona mientras responde preguntas en "Vacilando la tarde".

Fernando Villalona vive una etapa en la que canta mejor, respira mejor y, aunque parezca reiterativo, se considera un hombre nuevo, desde el momento en que tomó la decisión de abandonar el cigarrillo tras 30 años como fumador.
Esta decisión le ha reportado una mejor calidad de vida, dice,  reflejándose en una mejor voz al interpretar canciones que ya pasan de las tres décadas.
“Es la mejor decisión de mi vida, la mejor que he tomado en los últimos tiempos. A raíz de un problema de salud de mi hermano Martín le dije a Dios que dejaba de fumar a cambio de que se la devolviera, y la misericordia del Señor es tan grande que ahí anda mi hermano completamente nuevo”, reveló El Mayimbe en el programa “Vacilando la tarde”, que se transmite diariamente, de 4:00 a 6:00 de la tarde, por Neón 89.3 FM. Cuenta que Martin Villalona casi pierde el ojo derecho, cuando erróneamente se echó una gota de cloro pensando que era un medicamento para limpieza ocular.
“Martín siempre anda con un botiquín de mano, un día tomó un potecito y le echó cloro. Otro día buscó en el botiquín el potecito para echarse en el ojo y tomó el del cloro por equivocación, ya tú sabes qué pasó. El ojo se le quemó, todos pensamos que lo perdería”, recuerda Villalona. Confesó que la desicion no ha sido fácil, pero ha vencido la tentación gracias al poder de la voluntad. “Cada vez que me daba ansiedad pensaba en mi compromiso con Dios y esa situación me hizo entender el poder de la voluntad, sobrepasar lo que el cuerpo te pide, rechazarlo. A los dos días de abandonar el cigarrillo me encontraba cantando en Santiago Rodríguez y allí me di cuenta de que daba notas que hace muchos años no podía”, revela Fernandito.
El intérprete de “Confundido” cuenta que desde que dejó el cigarrillo, hace un mes, se sometió a un proceso de desintoxicación para terminar de sacar la nicotina acumulada durante tantos años. “Es un proceso que llevará su tiempo, tomando medicinas y ejercitando el cuerpo. Gracias a Dios me siento muy bien y aunque me hizo falta ya superé la etapa de la ansiedad”. (José Antonio Aybar/El Nacional)

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