La superba danzarina, Elizabeth Crooke, muestra su extraordinaria elasticidad
Elizabeth Crooke es el genio detrás de “Caperucita en el bosque encantado”. Con esta obra la artista ve los frutos de sus más de quince años de carrera artística.
Crooke, bailarina, coreógrafa y pedagoga de la danza hace de esta puesta en escena su tesis sobre las tablas pues en ella reúne el acervo de conocimientos que a través de los años ha adquirido.
“Necesitaba ver los frutos de lo que aprendí, tengo una niña de tres años, me encantan los niños y entiendo bien ese proceso y estructura que hay que hacer para hacer de cualquier clásico una obra de teatro”, manifestó.
Caperucita llega a las tablas como una adaptación de ese cuento pero es una adapatacion original de Crooke llevada a escena.
“Los pasos están hechos, la diferencia es el concepto que lleva ese párrafo, decidí Caperucita porque era el ideal como madre. El cuento tiene todas las preguntas para responder: la obediencia en los niños, la transmisión de valores, la preocupación de los padres para darle ciertas libertades o no, cuál es la función de la familia”, explicó la artista que se encuentra emocionada por el estreno.
Inicios
Con tan solo 10 años Elizabeth enfrentó a su familia porque tenía una meta: ser bailarina y dio literalmente sus primeros pasos con la profesora Miriam Bello.
Con tan solo 10 años Elizabeth enfrentó a su familia porque tenía una meta: ser bailarina y dio literalmente sus primeros pasos con la profesora Miriam Bello.
“Investigué de las clases de ballet y mi madre no quiso apuntarme; casualmente un día en que llevaban a una amiga a las audiciones, me entraron a hacer la audición porque Miriam vió en mi una niña despierta cuando al preguntarle su nombre a otra niña yo respondí en su lugar”, rememoró Crooke.
Su determinación y desempeño en la danza fue tal que de inmediato fua admitida en la academia.
“Con el paso del tiempo descubro que ella le dijo a mi madre que no solamente yo tenía el potencial sino que ella quería que la llevaran a su escuela privada”, aseguró al defender lo justo de la profesora Miriam, quien hace las cosas por talento más que por la economía.
La vida de la niña Elizabeth cambió, la apuntaron de tarde, le dieron permiso en la escuela, su madre dijo que no me podía llevar y ella dijo, con tan solo 11 años, que sabía llegar y así, con esa actitud, franqueó todos los obstáculos.
En la sangre
Es así como su madre y su familia se dan cuenta que Elizabeth “quiere esto demasiado”.
Es así como su madre y su familia se dan cuenta que Elizabeth “quiere esto demasiado”.
A los 14 años empieza a dar clases para pagar su media beca. En la academia daba el piso de pilates de la clase de Miriam y clase para principiantes.
“Poco a poco esto hizo de mi una profesora y me di cuenta que esto era lo que quería hacer como carrera”.
En 1995 paso al Ballet Clásico Nacional hasta llegar a convertirse en primera bailarina.
“A los 15 entro al Ballet Clásico Nacional, no tenía cedula y me tenían que pagar como una pasante. Mientras de tarde daba clases en el colegio Notredame e hizo el bachillerato de noche”, revela orgullosa la bailarina que nunca quiso ser un peso de nada en su casa o para sus padres.
Con el tiempo y gracias a su talento Crooke consigue becas para estudiar coreografía y pedagogía de la danza fuera del país.
DESARROLLO DE CARRERA Y NUEVOS PROYECTOS
Preparación
Elizabeth Crooke es pedagoga de la danza, masterante en artes escénicas y oríginalmente primera bailarina del Ballet Clásico Nacional.
En 1998, con 17 años viaja por primera vez a Nueva York gracias a su participación en el programa “Fantástico”, junto a Jorge Taveras para hacer cursos de danza contemporánea.
En el 2000 vuelve a la ciudad de los rascacielos para estudiar coregrafia; ahí hizo la especialidad Fosi y finalmente en 2006 se va a España con una beca por talento apoyado por el Ministerio de Cultura y Educación a hacer una licenciatura en Pedagogía de la Danza.
Coreografías
A su regtreso siguió bailando y creando espectáculos para el Ballet Clásico Nacional.
A su regtreso siguió bailando y creando espectáculos para el Ballet Clásico Nacional.
Casualmente llegó al país cuando Amaury Sánchez necesitaba alguien calificada en Foxy para llevar a cabo el músical Chicago.
Gana premios como coreógrafa por “Ballet 12” y “Los colores de la danza”.
Danzartstudio
La coreógrafa y pedagoga de la danza lleva a escena “Caperucita roja en el bosque encantado”, con su nueva compañía que es tambien una academia de baile que abrirá sus puertas próximamente. (Listín)
La coreógrafa y pedagoga de la danza lleva a escena “Caperucita roja en el bosque encantado”, con su nueva compañía que es tambien una academia de baile que abrirá sus puertas próximamente. (Listín)
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