ASÍ ES LA POLÍTICA JUNTA A LOS ENEMIGOS Y SEPARA A LOS AMIGOS y es el caso de Hipólito Mejía y de quien fuera su subalterno y amigo Miguel Vargas Maldonado, quienes pugnan por la candidatura presidencial del Partido Revolucionario Dominicano que busca denodadamente retornar al poder después de 8 años continuos "chupando" aire en la oposición.
¿Pero logrará el PRD esa colosal hazaña de vencer al partido de gobierno que es su principal antagonista y el cual es una organización, que considera la opinión pública, como la de mejor disciplina y respetuosa de sus estatutos, so pena de ser expulsado el dirigente que los transgreda?
Todo depende de como se desarrollen los acontecimientos desde ahora y hasta el 16 de mayo cuando se celebren las elecciones presidenciales y uno de esos acontecimientos es el valladar de la convención que tiene el PRD, el cual debe salvar y sin traumas que lo lleven a otra división como ha ocurrido en tiempos pasados.
De momento ha habido una guerrita de encuestas en donde una de ellas, la Hamilton da un 63 por ciento a Miguel Vargas Maldonado y un 35 por ciento ha Hipólito Mejía. Sin embargo El Centro Económico del Cibao revela en su encuesta que Hipólito supera a Miguel 61.5 por ciento en contra de 37.7 por ciento. Esas encuestas fueron ordenadas por los unos y por los otros.
Hasta ahí todo estaba más o menos porque cada cual se miraba en el espejo en donde luciera más elegante y agraciado a su figura. Pero hay más, y es la encuesta Gallup que no fue pagada ni por Miguel ni por Hipólito, sino que es un encargo de un periódico de Santo Domingo y la cual arrojó el resultado de 60.6 por ciento para Mejía y 39 por ciento para Miguel.
Este es un golpe de efecto que favorece a Hipólito Mejía y en consecuencia demoledor para Miguel Vargas Maldonado, un hombre que en otrora había ganado las últimas convenciones perredeistas en forma sencillamente abrumadora, pero desde ese mismo instante personeros de la cuadra del "Guapo de Gurabo" iniciaron una tenaz campaña en su contra señalándolo como un absolutista y desconocedor de las más elementales normas políticas.
En esa campaña, dirigida por gente que sabe de eso, restregaron en la cara a Miguel una serie de dicterios y acusaciones que a fuerza de esa sistemática repetición, ¡increiblemente! han dado al traste con su imagen a tal extremo que gente que antes ponderaban las prendas que como dirigente él tenía hoy son totalmente opuestos a que sea el candidato de su partido.
Y a todo esto nos hacemos la pregunta ¿De perder la convención del PRD, Miguel Vargas Maldonado le pondrá en bandeja de plata todo su concurso a sus hoy adversarios en la consecución de ganar el poder en el 2012?
Dice la tradición que las ofensas hirientes son como cuando se estruja un papel y que luego usted quiere volverlo a desplegar y que por más que lo alise las arrugas quedan para siempre.
De todas maneras esperaremos a que el tiempo vierta los hechos tal y como van a suceder porque un PRD dividido volverá a morder el polvo de la derrota ante un PLD que tiene como cabeza a un hombre que sabe como ganar elecciones y que sabe que en el lapso de un año y dos meses y medio que faltan para el certamen cívico muchas cosas pueden suceder que le permitan alzarse nueva vez con la victoria.
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